Predomina la aversión al riesgo impulsada por la inestabilidad geopolítica

Los mercados mostraron cierta complacencia al comienzo de la semana a pesar de la creciente inestabilidad en Oriente Medio. Las acciones europeas cerraron con ganancias y los precios de la energía cayeron, revirtiendo parcialmente el movimiento registrado el viernes. No obstante, después de una apertura positiva, los índices bursátiles estadounidenses cedieron, ya que los tipos de los bonos subieron tras la publicación de unos datos de ventas minoristas estadounidenses más fuertes de lo esperado. El tipo del Tesoro estadounidense a diez años probó ayer el nivel de 4,65%, casi 15 pb por encima del cierre del viernes, al tiempo que los datos macroeconómicos siguen sorprendiendo al alza. Este ciclo se ha caracterizado por un consumo fuerte y un empleo sólido y el aumento de las ventas minoristas indica que la Fed se mostrará muy prudente. Actualmente, solo se descuenta un recorte completo en 2024, en comparación con los seis recortes previstos en diciembre.

La aversión al riesgo prevaleció durante la noche a pesar de que los datos de crecimiento en China que fueron mejores de lo esperado. El hecho de que la recuperación económica de China siga siendo desigual ayudó a contener cualquier reacción positiva. Tanto el PIB del 1T24 (5,3% a/a frente al 4,8% de consenso) como la inversión en activos fijos superaron las previsiones, pero las ventas minoristas y la producción industrial no alcanzaron las estimaciones. No obstante, los mercados están adoptando una posición defensiva debido a las tensiones en Oriente Medio. Ayer, altos responsables militares israelíes reafirmaron que su país no tiene más opción que responder al ataque con aviones no tripulados y misiles perpetrado por Irán el fin de semana, incluso cuando dirigentes europeos y estadounidenses intensificaron las peticiones a Israel para evitar una escalada de las represalias que pueda provocar una extensión del conflicto bélico.

El USD domina, ya que los datos internos hacen subir los tipos del Tesoro estadounidense

El USD se movió en paralelo a los tipos estadounidenses y superó a la mayoría de sus homólogas del G10, con la excepción del CHF. El EUR cerró solo con una caída del 0,2%, ya que los tipos europeos siguieron los pasos de la curva estadounidense y el rendimiento del bund alemán a diez años registró un incremento de 8 pb. Los comentarios de los responsables del BCE mostraron que el consejo de gobierno está a la espera de nuevos datos para evaluar el ritmo de recortes de los tipos de interés este año. El economista jefe del BCE, Philip Lane, expresó su confianza en que la inflación volverá al objetivo del 2% en 2025, pero destacó que los aumentos salariales y los costes de los servicios siguen siendo elevados. El gobernador del BoF, François Villeroy, señaló que se tomará una decisión en junio, salvo sorpresa, pero insistió en que lo que sucederá a continuación no está claro. El calendario macro incluyó la publicación de datos de producción industrial de febrero, que coincidieron con las expectativas y aumentaron un 0,8% m/m. Hoy se publican los datos de la encuesta Zew en Alemania y las cifras de la balanza comercial de la UEM.

El JPY cae a su nivel más bajo en tres décadas y aumentan los riesgos de intervención

El JPY fue la divisa más débil del G10 y se debilitó hasta alcanzar el nivel más bajo en tres décadas frente al USD (154,55). El ministro de finanzas, Shunichi Suzuki, reiteró que siguen de cerca los movimientos en el mercado de divisas, aunque las apuestas especulativas han seguido creciendo y la presión sobre las autoridades japonesas está aumentando. El incremento de los precios del petróleo ejerce más presión sobre el JPY y la depreciación de la divisa podría convertirse en un problema clave para el objetivo de inflación del BoJ. Creemos que nos estamos acercando a niveles de intervención y observamos potencial bajista limitado para el JPY.

Datos laborales mixtos en el Reino Unido con una dinámica en deterioro

La GBP, que ayer cerró con pérdidas marginales, cede ligeramente tras la publicación que confirma que la dinámica del empleo está empeorando. La cifra de empleados asalariados del Reino Unido cayó en 67.000 en marzo y la lectura anterior se revisó a la baja de +20.000 a -18.000. La tasa de desempleo, de diciembre de 2023 a febrero de 2024, pasó del 3,9% al 4,2% (frente al 4,0% del consenso). Las decepcionantes cifras se vieron compensadas por un crecimiento salarial mayor de lo esperado. El salario regular promedio (excluidas bonificaciones) aumentó un 6,0% a/a (frente al 5,8% de consenso), mientras que el salario total (incluidas bonificaciones) subió un 5,6% (frente al 5,5% de consenso). El crecimiento de los salarios sigue sorprendiendo al alza, lo que puede favorecer cierta prudencia por parte del BoE, pero las tendencias subyacentes sugieren que el mercado laboral se está desacelerando. Si las presiones inflacionistas continúan disminuyendo, el aumento de los niveles de desempleo favorecerá el inicio del ciclo de flexibilización del BoE antes de lo que espera el mercado (el primer recorte no se descuenta totalmente hasta septiembre).

La tensión en Oriente Medio y el sentimiento de riesgo marcan la trayectoria de las divisas de beta alta

Las tensiones en Oriente Medio continuaron marcando el tono subyacente de las divisas de beta alta el lunes, las cuales, excluyendo la SEK que no varió, sufrieron pérdidas generalizadas. Además, los sólidos datos de ventas minoristas de marzo en EE.UU. ayudaron a elevar la curva de tipos estadounidense, haciendo retroceder a las divisas de beta alta frente al USD. El NZD fue la divisa menos rentable en una sesión en la que prevaleció la aversión al riesgo. El conflicto bélico continúa manteniendo a los inversores atentos a los precios del petróleo. El lunes, el petróleo crudo Brent registró una ligera caída, con la referencia cerca de 90 USD/barril, pero, antes de la apertura, el petróleo crudo avanza ligeramente y las divisas de beta continúan parpadeando en rojo. En general, dado el actual contexto de tensiones geopolíticas, el desempeño de las divisas de beta alta debería seguir vinculado al sentimiento de mercado. En caso de que las tensiones aumenten, esto debería traducirse en un peor desempeño para el bloque.

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