El S&P 500 cerró con alzas marginales y marca nuevo máximo histórico

Las malas dinámicas sanitarias y un BCE que no parece tener prisa por aumentar sus estímulos monetarios, a pesar del impacto económico que tendrá el coronavirus sobre el crecimiento económico del primer trimestre, frenaron la apertura alcista de las bolsas europeas, que fueron de más a menos por segundo día consecutivo, cerrando con caídas ligeras, más intensas en las bolsas periféricas. El italiano FTSE Mib (-0,98%) y el Ibex 35 (-1,00%) terminaban la jornada con pérdidas entorno al 1%. El sector tecnológico volvió a liderar la sesión bursátil, que tuvo un sesgo más defensivo.

En Estados Unidos, la publicación de unos buenos datos macroeconómicos permitió a los mercados de renta variable desplegar un mejor comportamiento y el índice S&P 500 (+0,03%) cerró con alzas marginales, suficientes para marcar un nuevo máximo histórico. Las acciones tecnológicas encabezaron la clasificación sectorial, mientras que los sectores cíclicos ocuparon  las últimas posiciones del ranking. El Nasdaq 100 (+0,82%) volvía pues a ser el protagonista de la jornada seguido del S&P 500 y Dow Jones (-0,04%), que cerraban prácticamente planos.

En los mercados de renta fija, asistimos a un significativo repunte en las rentabilidades de los bonos soberanos alemanes y estadounidenses, mientras que las primas de riesgo periféricas se ensancharon por segunda sesión consecutiva. El euro se apreció con claridad frente a la divisa estadounidense, tras la reunión del BCE y vuelve a apuntar hacia la cota de los 1,22 dólares. El crudo Brent por su parte, se mantuvo sin cambios en los 56 dólares por barril.

En cuanto a la agenda macroeconómica europea, el sentimiento manufacturero de enero en Francia alcanzo una lectura de 98 puntos, por encima de los 94 que esperaba el consenso de analistas. Por otra parte, los pedidos de fábrica de noviembre en Italia mostraron un retroceso del -1,3%, corrigiendo el fuerte repunte del 3% registrado el mes anterior. En otro orden de cosas, la confianza del consumidor de enero en la eurozona se situó en los -15,5 puntos, algo por debajo de los -15,0 anticipados por el mercado. Para terminar, el BCE reconoció los mayores riesgos sobre el escenario económico que plantea la pandemia, pero no anunció medidas adicionales y comunicó que el actual estímulo parece adecuado a los ojos de los miembros del Consejo de Gobierno.

En Estados Unidos, las construcciones iniciales de viviendas del mes de diciembre sorprendieron al mercado con un fuerte repunte del 5,8%, que excedía con claridad el 0,8% que esperaban los expertos. Los permisos de construcción también avanzaron con mucha intensidad, un 4,5%, frente a la caída del -1,7% que había previsto el consenso. Se trata de los niveles de construcción de viviendas más altos desde el año 2006. Por otra parte, el índice manufacturero de la Fed de Filadelfia repuntó hasta los 26,5 puntos, muy por encima de los 11,8 esperados. Para terminar con la batería de buenas noticias, las solicitudes de subsidios  por desempleo se relajaron hasta las 900 .000 peticiones, frente a las 935.000 que habían pronosticado los analistas.

El IPC de diciembre en Japón se ha situado en el -1.2% interanual, una décima por encima de las previsiones del consenso. Por otra parte, el PMI preliminar compuesto de enero ha retrocedido hasta los 46.7 puntos, desde los 48,5 anteriores.

Nueva jornada de elevado interés macroeconómico para terminar la semana. Hoy conoceremos las ventas minoristas de diciembre en Reino Unido, el PMI compuesto preliminar de enero en Francia, Alemania y la eurozona, así como el PMI preliminar de enero en Reino Unido y Estados Unidos.

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